Fartons Polo es una empresa familiar con más de medio siglo de experiencia, dedicada a la producción de fartons y derivados de la chufa. Para esta campaña buscaba un giro en su comunicación, hasta la fecha basada en insights locales y poco representativos de su envergadura empresarial. La marca es conocida principalmente por sus fartons, cuando la realidad es que su gama de productos es mucho más rica y variada.
Para dar a conocer toda la gama de productos y, sobre todo, mejorar su reconocimiento de marca, huimos de los insights y chistes locales para contar una historia universal con la que cualquiera pudiese empatizar. Para ello nos apoyamos en un insight reconocible fuera de nuestras fronteras y a partir de él construimos un corto de animación que contaría además con la participación de uno de nuestros ilustradores más valorados a nivel mundial: Paco Roca.
Así nació “Sangre de Horchata: la historia del pueblo que llevaba la horchata en el corazón”. Una pieza de ficción que narraba la historia de un pueblo que tenía, literalmente, la sangre de horchata, y que decidió compartir su don con el resto del mundo.
La historia puso sobre la mesa una realidad incómoda: vivimos tan estresados que quizá nos venga bien un poco de horchata en la sangre, tomarnos la vida con más calma. Así fue como dimos la vuelta a un concepto denostado, para llevárnoslo a nuestro terreno desde una perspectiva más positiva, lo que nos sirvió para generar contenido en redes sociales.
Para completar la campaña quisimos dar un paso más, haciendo posible que la gente pudiese cambiar su sangre por horchata. Para ello llegamos a un acuerdo con el Centro de Transfusión de la Comunidad Valenciana, que desde entonces entregaría horchata y fartons a sus donantes de sangre.
La campaña obtuvo una magnífica acogida en redes, con cerca de un millón de visualizaciones en Facebook, Twitter, Instagram y Youtube, más miles de comentarios, interacciones y compartidos a lo largo de los dos meses de duración.
0 %